Durante miles de años, se ha dicho que disciplinas físicas como el yoga, el Tai Chi y la danza sufí aumentan los poderes mentales y espirituales. Si esto es cierto, ¿cómo se podría explicar esto, y mejor aún, cómo podemos usar este hecho, en la práctica, para mejorar nuestras vidas como artistas, empresarios, padres y socios?
Primero, tenemos que despojar el misticismo de la actividad. No es que estas actividades no tengan un aspecto esotérico, sino que tenemos que abordarlas en el nivel más realista. Cuanto más alto es el árbol, más profundas son las raíces. Cuanto más alto es el edificio, más profundos son los cimientos. Si quieres volar, asegúrate de que tu atadura sea fuerte. Por lo tanto, debemos comenzar con una explicación fisiológica simple (¡si es posible!) y luego sugerir una forma en que esto se relacione con los logros artísticos avanzados, las habilidades de relación, la claridad intelectual y el crecimiento espiritual.
Mi propia iluminación en este sentido provino del estudio del trabajo del entrenador Scott Sonnon, el primer artista marcial estadounidense que entrenó en la antigua Unión Soviética. Mientras estaba allí, este hombre brillante conoció a científicos rusos del deporte y el rendimiento que habían estado estudiando el sistema de salud indígena en los Montes Urales durante un siglo.
Allí, encontraron conceptos de movimiento y bienestar equivalentes a cualquier cosa en China o India. Compartieron muchos de estos conceptos con Sonnon, y lo invitaron a compartirlos a su vez con los estadounidenses. A lo largo de los años, el entrenador Sonnon ha creado cientos de libros, videos y ensayos sobre sus interpretaciones de este conocimiento básico.
Quizás el más importante en términos de Cuerpo-Mente es lo que él llama la Espiral de Rendimiento del Estado de Flujo. Para poder relatar este pensamiento innovador en un ensayo tan corto, hay que condensar considerablemente:
1) Toda técnica física se compone de tres aspectos: respiración, movimiento y estructura.
2) Cada uno de estos aspectos está controlado por los otros dos (la respiración es creada por el movimiento y la estructura, etc.)
3) La tensión desintegra esta estructura. En otras palabras, cuando estás bajo estrés, los signos fisiológicos se manifestarán en tu frecuencia respiratoria o superficialidad, tu postura, tu tensión muscular. ¡Es por eso que los detectores de mentiras funcionan!
Antes de morir, Hans Selye, el creador del concepto de estrés, dijo que él mismo se había expresado mal, que no es el estrés lo que nos duele, es la tensión. El estrés es la presión a la que estamos sometidos. Pero la tensión es el grado en que ese estrés nos deforma fuera de la verdad.
El estrés no es el enemigo. De hecho, cuando se maneja de manera saludable, es el principal desencadenante del crecimiento. Así que la clave es evitar la tensión.
Pasemos un poco a una verdad sobre las actividades artísticas e intelectuales: su capacidad para utilizar su inteligencia, educación, habilidades o talentos estará en proporción directa con su capacidad para mantener el flujo bajo estrés. O para decirlo de otra manera, en la vida, somos recompensados por la cantidad de estrés que podemos manejar sin doblarnos. El bloqueo de los escritores, por ejemplo, no es más que una mala reacción al estrés del rendimiento.
Combinando estas ideas, lo que tenemos es que el equilibrio mental y emocional bajo estrés conduce a la excelencia. Combine esto con el hecho de que aprender a lidiar con el estrés físico desarrolla habilidades que son tremendamente aplicables al ámbito mental. La parte más vulnerable de la tríada del Estado de Flujo (respiración, movimiento, estructura) es la respiración.
La respiración adecuada se degradará por el estrés antes de que pueda detectarlo en la postura o la tensión muscular. Esta es una de las razones por las que el control de la respiración se aborda en la mayoría de las religiones y disciplinas espirituales, ya sea a través del pranayama (yoga), el ejercicio, los himnos, las oraciones rituales, la danza o las posturas sagradas.
Un buen profesor de yoga, por ejemplo, colocará al alumno en una postura lo suficientemente extrema como para forzar la concentración total. Cuando el estudiante aprende a relajarse y concentrarse, esa postura se vuelve relativamente fácil y se le da una postura más extrema. El punto es enseñar al estudiante a monitorear su propio proceso interno. Los profesores de artes marciales finas o de meditación respiratoria utilizan técnicas similares.
El estudiante aprende a reconocer los primeros signos de tensión y a disiparlos. NADA en la vida crea más estrés que la falta de oxígeno, y aprender a mantener la calma en medio de la deuda de oxígeno te enseñará a mantener la calma cuando los niños gritan, cuando tu jefe está alborotado, cuando alguien te corta el paso en la autopista.
O cuando tienes una fecha límite para escribir, o cuando la inseguridad y el miedo golpean la puerta de tu resolución.
Practicar deliberadamente una disciplina física para mejorar esta cualidad de calma y centramiento, mientras que al mismo tiempo se trabaja hacia metas equilibradas en cuerpo, mente y espíritu, te expone a las corrientes de la vida mientras te ayuda a desarrollar las habilidades y estrategias necesarias para sobresalir. Esto, con el tiempo, conduce a la excelencia, incluso en un ámbito puramente mental.
Existen numerosas disciplinas que enseñarán a respirar correctamente bajo estrés, y este artículo ha enumerado algunas. Si deseas alcanzar tu máximo potencial como ser mental, espiritual y emocional, busca una de estas técnicas e intégrala en tu vida. Es una de las mejores inversiones que podrías hacer en tu futuro.
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